Identidad de la Coronación Pontificia de Ntra. Sra. de la Merced

En el marco de la celebración de la Virgen María en la Expectación del Parto, advocación mariana patrona de la Provincia Mercedaria Argentina, se presentó este 18 de Diciembre en la Basílica de la Merced de Córdoba el logotipo que acompañará los eventos de la Coronación Pontificia de Nuestra Señora de la Merced de los Maitines.

El logo está formado por diversos elementos que progresivamente ofrecen un solo mensaje:

Un perfil que es camino
Es el perfil de María, la Madre de Dios, la Madre de toda humanidad y de toda la humanidad. Es la histórica imagen de Nuestra Señora de la Merced de los Maitines, compañera del pueblo cordobés desde fines del siglo XVIII. La madre de mirada penetrante, labios que cantan y pies descalzos que desde el Coro de la Basílica de la Merced de Córdoba acompaña a la comunidad en el servicio y la oración redentora. La Comendadora, la Virgen del Coro o la Virgen de los Maitines es la misma y auténtica expresión de María de la Merced que preside la comunidad que funda en Barcelona en 1218 con san Pedro Nolasco, para la visitar y liberar a los cautivos. En su perfil María proclama un Magníficat que nos convoca a cantar y caminar.

Un brote nuevo
El perfil de la Madre se materializa en un leño vivo. En un extremo es tierno, reverdece y es profecía en las nuevas periferias de la esclavitud; en el otro extremo es madurez, trayectoria y memoria fecunda de ofrenda de vidas a cambio de libertad.
El perfil de María es también camino que todos podemos recorrer. Itinerancia maternal que provoca encuentros fecundos y salidas presurosas hacia la libertad amenazada.

Una llama encendida
El extremo maduro del perfil de María se vuelve fecundo en el fuego liberador, que es pasión por Cristo y pasión por la humanidad. Es un fuego que abraza y enciende, no aísla, no destruye, abre la vida a nuevos caminos de liberación, porque la vida clama: “ya es la hora” y “la fiesta no puede acabar”.
La llama encendida tiene los colores de la Merced: sangre y oro. Se despliega al viento como cabellera de la Madre, que en el canto y la plegaria, peregrina los corazones de sus hijos e hijas.

La Cruz
El perfil de María, que es itinerario y proyecto de vida creyente, fuego que abraza y abrasa, tienen su punto de partida en la ofrenda redentora de Cristo en la Cruz. En el calvario, María reina junto a su Hijo. En los nuevos calvarios de la historia, María reina en los corazones heridos y esperanzados de los nuevos cristos.

Tres gotas de sangre: La Trinidad que se dona
La entrega redentora de Cristo no sucede en solitario. Es la Trinidad Santa, comunidad de amor, que se dona en rescate por toda humanidad cautiva en la ofrenda del Hijo. Es en comunidad, compartiendo entre religiosos y laicos, poniendo en común dones, carismas y desafíos del camino, que la ofrenda de la vida llega a ser moneda de rescate. El voto de redención de la familia mercedaria es ícono de la desmesura del amor trinitario por la humanidad herida.

Doce estrellas – Doce rostros
Las doce estrellas que coronan a María son doce rostros de las nuevas esclavitudes. Rostros, relatos, historias y oportunidades de caminar al lado en gesto de hermandad solidaria. Encuentros itinerantes de cruz a Cruz.

Corona – Servicio
Dios la hizo Reina porque antes ella se hizo esclava y servidora de la humanidad con su SÍ generoso. Los pobres y pequeños con rostro propio, son las joyas de su corona. Su reinado hermana a todos los caídos de la historia, los eleva y enaltece en una sinfonía de solidaria hermandad.

Tipografía: El estilo tipográfico es el de los primeros misioneros de nuestro continente.