Beatos Mercedarios

Beata Mariana de Jesús

Nació en Madrid, España, el 17 de Enero de 1565. Desde muy joven eligió a Jesús como único esposo. 

Vivió dedicada a la vida de caridad ayudando a los enfermos y necesitados. Tuvo una gran devoción por la Virgen María y el Santísimo Sacramento. 

Fue admitida en calidad de terciaria a recibir el hábito de la Merced, que le fue impuesto por el padre Felipe Guimerán, Maestro General de la Orden, quien al año siguiente, el 20 de mayo de 1614, le recibió la profesión.

Falleció el 17 de abril de 1624. Su cuerpo se conserva incorrupto en la iglesia madrileña de Don Juan de Alarcón. 

El Papa Pío VI la beatificó solemnemente en la basílica vaticana el 25 de mayo de 1873.

Fiesta Litúrgica: 17 de abril

Al fallecer su madre, cuando tenía apenas nueve años, su padre contrajo segundas nupcias, y la madrastra de Mariana empezó a hacerle la vida imposible a la niña, y pronto, para alejarla de casa, le preparó un matrimonio. La joven ya había elegido como único esposo a Jesús. Angustiada se dirigió a la capilla de la Virgen de los Remedios, de los mercedarios, donde encontró al padre Juan Bautista González, quien iluminó sus pasos.

Desde 1598 hasta su muerte fue su director espiritual. El Señor la visitó con una grave enfermedad, por la que no pudo ingresar a ningún convento en calidad de religiosa. Pero puso su morada en una pequeña casa, vecina al convento de los mercedarios recoletos, donde pasó varios años dedicada a la oración y la penitencia. Finalmente fue admitida en calidad de terciaria a recibir el hábito de la Merced, que le fue impuesto por el padre Felipe Guimerán, Maestro General de la Orden, quien al año siguiente, el 20 de mayo de 1614, le recibió la profesión.

Vestida con el hábito vivió en esa casa dedicada a las obras de caridad hacia los enfermos y necesitados. Se distinguió, además, por su humildad, su devoción a la Santísima  Virgen y al Santísimo Sacramento. Escribió su autobiografía espiritual. Atacada por violenta pleuresía, falleció el 17 de abril de 1624. 

Su cuerpo se conserva incorrupto en la iglesia madrileña de Don Juan de Alarcón y ha sido examinado en 1627, cuando se inició el proceso de beatificación. Se han realizado nuevamente reconocimientos de su cuerpo en 1731 y en 1735; en 1924, con motivo del tercer centenario de su muerte, y en junio de 1965, con ocasión del cuarto centenario de su nacimiento. Pío VI la beatificó solemnemente en la basílica vaticana el 25 de mayo de 1873.

 

La causa de la beata Mariana de Jesús se lleva por vía ordinaria, no por vía de culto. El 31 de agosto de 1782 el Papa da el decreto sobre los milagros en el convento de San Janino, de los mercedarios descalzos. 

La incorrupción fue considerada milagro de segundo grado, y la curación de Pedro Fernández, de tercer grado. El 18 de enero de 1783, el papa Pío VI beatifica solemnemente a Mariana de Jesús en la Basílica Vaticana.

El 8 de marzo de 2011 se abre el proceso diocesano de canonización en la iglesia de las Mercedarias del convento de Alarcón de Madrid. 

 

ORACIÓN  A LA BEATA MARIANA DE JESÚS

Oh Señor, que a tu virgen Mariana,

azucena purísima de la Orden de la Merced

y modelo de penitencia y de amor a la Eucaristía, 

le enseñaste a servir a Cristo en los hermanos;

concédenos por su intercesión 

participar íntimamente de los misterios que celebramos 

y escuchar la voz de tu Espíritu 

que nos invita a la conversión 

y al servicio fiel de nuestro prójimo.

Escucha Señor los ruegos que por su mediación te dirijimos,

a fin de que remedies nuestras necesidades.

Amén

Beata Margarita María de Maturana

Nació en Bilbao, el 25 de julio de 1884. En 1903, luego de descubrir su vocación religiosa en el Colegio de las Hermanas Mercedarias de Bérriz, ingresa en el Monasterio a los 19 años. 

Vivió con gran fidelidad su vida de monja de clausura, dedicada durante dos décadas a la educación de las alumnas. Pero de a poco fue recibiendo la inspiración de la misión en salida y al mundo entero. Las jóvenes y las religiosas de su comunidad se sintieron contagiadas por este entusiasmo, y fundan el Instituto de Mercedarias Misioneras de Bérriz.

Murió el 23 de julio de 1934, dos días antes de cumplir sus 50 años. Desde el primer momento, brotó en quienes la conocieron el reconocimiento de que había sido una vida entregada plenamente en el seguimiento de Jesús. 

Fiesta Litúrgica: 24 de julio

Nació en Bilbao, el 25 de julio de 1884, en una familia cristiana, y junto con su hermana gemela fue bautizada en la parroquia de San Antón. Las gemelas recibieron en su bautismo los nombres de Pilar y Leonor.

La educación familiar y la formación en su año de internado en el Colegio que tenían las Mercedarias del Monasterio de Bérriz, hicieron descubrir a Pilar la llamada de Dios a la vida religiosa. Entró en el Monasterio en 1903, a sus 19 años, tomando el hábito, con el nombre de Margarita María. Desde el primer momento se entregó a Dios con una gran fidelidad en su vida de monja de clausura, dedicada guante 20 años a la educación de las alumnas. Dos son las características que la distinguen: su afición a la oración y su caridad exquisita. En esta vida de oración constante, en su intimidad con el Señor, su vocación mercedaria de redención de cautivos, iba floreciendo en nuevos y amplios horizontes. Fue ahondando en el deseo de hacer llegar al mundo entero la dicha que ella gozaba en la comunicación con Dios y el amor a Jesucristo que sentía crecer más y más en su vida. Escribía el 5 de mayo de 1912:”…Yo no deseo más que darle a conocer a los que me ha encomendado que es el mundo entero”. Desde entonces sus ansias de dar a conocer a Jesucristo al mundo entero se fueron dilatando, primero en la oración y luego en el trabajo con las alumnas, entusiasmando con su mismo ideal a toda la Comunidad.

En el año de 1913 dice que le gusta pedir por los misioneros, y mantuvo una comunicación frecuente, con algunos que visitaron el convento y el colegio. Eran los años del despertar misionero en España. Bérriz se incorporó a él. En el Colegio inició, en 1920, la asociación “Juventud Mercedaria Misionera de Bérriz” y a través de ella, Margarita María formó en el espíritu misionero a varias generaciones de jóvenes que, bien como religiosas o como esposas, supieron vivir el ideal misionero allí donde Dios las iba llamando. 

Todo este movimiento no podía quedar encerrado en el interior de un monasterio de clausura. La respuesta de los signos de los tiempos pedía algo más. Margarita María supo estar abierta a las fuertes llamadas del espíritu, y con una gran confianza, con el permiso de Roma, las monjas rompieron las rejas de su clausura y se dispersaron en el lejano Oriente (China, Islas de Oceanía Saipan y Ponapé y Japón. Tal transformación tuvo lugar en 1930, por petición de las 94 monjas, petición sellada con un si unánime en votación secreta, como pedía Roma. Este fue el gran anhelo de la Madre Margarita al formar el Instituto de Mercedarias Misioneras de Bérriz: llevar la Buena Nueva de la redención y liberación hasta los confines del mundo.  

Murió el 23 de julio de 1934, dos días antes de cumplir sus 50 años. Desde el primer momento, brotó en quienes la conocieron el reconocimiento de que había sido una vida entregada plenamente en el seguimiento de Jesús. El 16 de marzo de 1987, sus Santidad Juan pablo II firmó la declaración de sus virtudes heroicas y la proclamó Venerable. Y el 28 de Abril de 2006, su Santidad Benedicto XVI firmó el decreto que dio paso a la Beatificación, el día 22 de octubre de 2006 en Bilbao.

 

ORACIÓN A LA BEATA MARGARITA MARÍA DE MATURANA

Dios de ternura y misericordia, 

que has suscitado en tu Iglesia

 a la beata Margarita María

para dar a conocer a todos los pueblos

tu amor manifestado en Jesús 

y la Nueva Vida que nos das en Él,

concédenos que siguiendo su ejemplo 

seamos testigos fieles

de tu amor y de tu vida. 

Te lo pedimos por Nuestro Señor Jesucristo.

AMÉN

Beato Zegri y Moreno

Es el fundador de la Congregación de las Hermanas Mercedarias de la Caridad.  Sacerdote mercedario español, nació en Granada el 11 de Octubre de 1831.

Impactado por los problemas sociales y por las necesidades de los más desfavorecidos, se sintió llamado, también, a fundar una Congregación religiosa para liberar a los seres humanos de sus esclavitudes. La funda bajo la protección e inspiración de María de la Merced, la peregrina humilde de la gratuidad de Dios, en Málaga, el 16 de marzo de 1878.

Fiesta Litúrgica: 11 de septiembre

Nació en Granada, el 11 de octubre de 1831, en el seno de una familia cristiana. Sus padres, Don Antonio Zegrí Martín y Dña Josefa Moreno Escudero, le dieron una esmerada educación. Forjaron su rica personalidad en los valores humano/evangélicos; valores que le otorgaron una elegancia natural y una capacidad de relación entrañable y cercana para con todos.

Dios Padre, por su Espíritu, le regaló la vocación sacerdotal para servir a los seres humanos el Evangelio de la caridad redentora. Después de cursar sus estudios se ordena sacerdote en la catedral de Granada el día 2 de junio de 1855.

Fundó la Congregación de las Hermanas Mercedarias de la Caridad en Málaga, el 16 de Marzo de 1878.

Hijo fiel de la Iglesia, y bajo el signo de la obediencia de la fe, como entrega de una vida, muere un 17 de marzo de 1905 en la ciudad de Málaga, sólo y abandonado, como él había decidido morir; a ejemplo del Crucificando, fijos los ojos en el autor y consumador de nuestra fe. 

El sueño más acariciado por él, que fue también el carisma que recibió como don, para bien de la Iglesia y de la comunidad humana, fue:

«Curar todas las llagas, remediar todos los males, calmar todos los pesares, desterrar todas las necesidades, enjugar todas las lágrimas, no dejar, si posible fuera en todo el mundo, un solo ser abandonado, afligido, desamparado, sin educación religiosa y sin recursos»

Vivió e hizo suyas todas las virtudes cristianas de manera heroica, sobre todo la fe, la esperanza y la caridad y todas aquellas virtudes humanas que dan elegancia a la caridad y la hacen entrañable en las relaciones: humildad, afabilidad, dulzura , ternura, misericordia, bondad, mansedumbre, paciencia, generosidad, gratuidad y benevolencia.

Canonización

La Iglesia reconoció sus virtudes heroicas proclamándolo Venerable el día 21 de diciembre del año 2001.

Realizó un milagro que la Iglesia ha considerado de segundo grado en la persona de Juan de la Cruz Arce, en la ciudad de Mendoza, Argentina, restituyéndole el páncreas, que se le había extirpado totalmente en una intervención quirúrgica.

Su beatificación, el día nueve de noviembre de 2003, nos introduce a todos en la merced de Dios, en ese espacio de gratuidad, de Gracia liberada y redención de todo lo que oprime a los hombres y mujeres de hoy.

Dejemos que su palabra inunde nuestro corazón cuando nos dice: ¡Cómo llenará vuestro corazón, como os parecerá hermoso, el día que podáis decir al terminarlo: hoy he curado esta llaga, he dulcificado tal desgracia, he enjugado las lágrimas de alguien que sufre con una palabra de consuelo!

Beato Mariano Alcalá y 18 Compañeros Mártires

Se trata de 19 Religiosos Mercedarios de la Provincia de Aragón que murieron mártires, muertos “in odium fidei” entre el 25 de julio de 1936 y 1 de enero de 1937 en Barcelona y Teruel, España. Encabeza la lista el Beato Mariano Alcalá Pérez, nacido el 11 de mayo de 1867 y fusilado el 15 de septiembre de 1936.

Los otros 18 religiosos que encontraron una muerte violenta son: Padre Tomás Carbonell Miquel, Padre Francisco Gargallo Gascón, Padre Manuel Sancho Aguilar, Padre Mariano Pina Turón, Fray Pedro Armengol Esteban Hernández,  Fray Antonio Lahoz Gan, Fray José Trallero Lou, Fray Jaime Codina Casellas, Padre José Reñé Prenafreta, Fray Antonio González Penín, Padre Tomás Campo Marín, Padre Francisco Llagostera Bonet, Fray Serapio Sanz Iranzo, Padre Enrique Morante Chic, Padre Jesús Eduardo Massanet Flaquer, Padre Amancio Marín Mínguez, Padre Lorenzo Moreno Nicolás, y Fray Francisco Mitjá Mitjá.

Son conocidos como “Los mártires de Aragón”.

Fiesta Litúrgica: 16 de septiembre

Proceso de Canonización

El proceso diocesano se abrió en Lérida en 1957 y se encerró en 1959. La Congregación de los Santos dio la validez jurídica en Roma el 9 de junio de 1995. La comisión de teólogos dio el parecer favorable el 30 de septiembre de 2009. 

El 13 de diciembre de 2011 el congreso de Cardenales y Obispos han reconocido que los citados siervos de Dios fueron muertos por fidelidad a Cristo y a la Iglesia. 

El Santo Padre, papa Benedicto XVI, aprueba el martirio de los 19 mercedarios el 19 de diciembre de 2011. 

La ceremonia de beatificación se celebró  en Tarragona, España, el 13 de octubre de 2013.

 

ORACIÓN A LOS BEATOS MÁRTIRES DE ARAGÓN

 

Señor Padre Santo, 

tú que concediste al Beato Mariano Alcalá y a sus compañeros 

fidelidad total a su vocación mercedaria 

siguiendo a Cristo Redentor hasta el martirio, 

y los hiciste testigos de la caridad perfecta en el perdón de sus perseguidores, 

concédenos, por su intercesión, la firmeza perseverante en la fe, 

y una caridad sincera para amar en Cristo a todos los hermanos.

 Por Jesucristo Nuestro Señor.

AMÉN