Jóvenes de La Merced en Latinoamérica

El pasado domingo 18, día mundial de las misiones, jóvenes de distintas congregaciones de la familia mercedaria se unieron en una peregrinación virtual “tejiendo redes de misericordia”. Se unieron en oración chicas y chicos de 21 países de América Latina en donde existe una presencia de religiosas o religiosos mercedarios.

Rompiendo las barreras geográficas e institucionales, con el beneficio que hoy brinda la tecnología y la virtualidad, jóvenes de 10 congregaciones religiosas y 4 monasterios mercedarios interactuaron por las redes sociales mostrando las realidades y rostros de cada país, sus costumbres y cultura, comidas típicas y danza, oración y espiritualidad, todo compartido en familia y al servicio del compromiso redentor.

Sigue a Jóvenes de la familia mercedaria de Latinoamérica en Facebook, Instagram y YouTube

Haz clik en las negritas…

El padre General de la Orden de la Merced, fray Juan Carlos Saavedra Lucho, compartió su saludo y bendición a las personas que participaron a lo largo de la tarde del pasado domingo. La peregrinación comenzó a las 18h (hora de Argentina) y tuvo una duración de aproximadamente 6 horas, hasta la medianoche, con miles de interacciones.

Si quieres conocer más sobre esta iniciativa de la peregrinación virtual, cómo surgió la idea, detalle de las congregaciones y monasterios participantes y de cada país, los momentos de la planificación, los equipos de trabajo y los ejes de cada estación te puede interesar leer “Así se gestó la peregrinación de Jóvenes LatAm”.

Haz clik en las negritas …

¿Para qué peregrinar?

• Propiciar un encuentro virtual juvenil mercedario latinoamericano
• Rezar junto a María de la Merced como madre y peregrina, atendiendo a los clamores de cautividad de nuestros pueblos e invitándonos a comprometernos con la vida
• Celebrar y honrar a María ofreciendo nuestras culturas en la fiesta de la redención

¿Por qué peregrinar?

Peregrinar es un modo peculiar de encontrarse con Dios: los peregrinos marchan orando con sus pasos y con sus cuerpos, con sus voces y con sus cantos, con sus cansancios y sus pies dolidos, y con su corazón fijo en la meta. Es la “oración del pobre y del cautivo” que lleva a la presencia de Dios y de María de la Merced de Latinoamérica sus clamores y lo más sagrado de su pueblo, la vida.

 El peregrinar tiene el “ritmo del corazón”. La diferencia entre peregrinar y caminar es que el peregrino lo hace en presencia de Dios hacia un lugar santo. Es un acto que involucra la Fe. Se peregrina hacia adelante y hacia adentro.

Continuemos peregrinando hacia los santuarios de misión y liberación en medio de nuestros pueblos latinoamericanos.

Con la confianza cierta de que María de la Merced está esperándonos al pie de las cruces y cautividades de nuestros hermanos y hermanas. ¡Somos enviados hoy y siempre a ser Merced!¡Ánimo, somos una gran comunidad liberadora!