¡Entren peregrinos! Posadas Navideñas 2023

Comunidades mercedarias de realizan las Posadas Navideñas, preparándose para la Navidad. En Ranelagh, Córdoba en la Basílica de la Merced y en el León XIII; en Tucumán, en la misión de Fortaleza y Nueva Esperanza de Paraguay, se viven desde el 16 al 25 de diciembre estos espacios de encuentro con oraciones, reflexiones compartidas y celebración fraterna.

La práctica de las Posadas es tradicional en México y está presente en muchas poblaciones de toda América. Representan una fusión de culturas y se van enriqueciendo con los particulares modos de celebrarlas en cada comunidad. 

La idea de “pedir posada”, imita el gesto evangélico de José y María buscando lugar para el nacimiento de Jesús. Las imágenes a veces son llevadas en andas, en ocasiones algunos peregrinos tocan instrumentos musicales y algunos niños van caracterizados como la Sagrada Familia, como ángeles o pastores. Los posaderos anfitriones participan de un diálogo en el que inicialmente les niegan la entrada, pero luego acogen a todos en la celebración.

En nuestras comunidades de la Provincia Mercedaria Argentina, las Posadas comenzaron a llevarse a cabo desde la Casa de Formación Padre José León Torres, que funciona en la comunidad del Colegio León XIII.

Fray Hernán Salegas, recuerda que en el año 2005 estando en el postulantado propuso la idea como una forma distinta de vivir el tiempo de preparación para la navidad. Conocía sobre las Posadas porque cuando era adolescente una religiosa había traído esa práctica a su comunidad. 

“Cuando la comunidad del León XIII se animó a innovar, puse todo de mi en preparar «las posadas» -nos cuenta-. No había andas, así que tuve que fabricar unas; las imágenes que utilicé en ese momento fueron a las de Virgen Expectante que prestó el padre Jose Luis y la imagen de San José que estaba en una repisa en el postulantado.  Con la ayuda de uno de los empleados de la casa, armamos un carrito donde pusimos las bocinas y equipo de sonido.

Las posadas como las conocí tenían un gesto muy significativo: pedir posada para José y María, y el Niño que ya viene. Experiencia bíblica que todos conocemos. Consistía en dialogar el dueño de casa y los peregrinos a través de un villancico, un hermoso diálogo, que también tuve que contextualizar y modificarlo. De ese modo la familia que recibía las imágenes nos permitían pasar a sus casas. Luego ya dentro de la casa realizábamos la novena. Proponíamos un texto bíblico, reflexión, intenciones, un Padre Nuestro, intercalado con cantos de villancicos. Finalizado el momento de oración compartíamos algún refresco o alguna cosita rica que la familia nos invitaba o que los peregrinos llevaban. Las imágenes quedaban hasta el otro día y cuando las buscábamos realizábamos la bendición de la casa y luego entre cantos de villancicos nos dirigíamos a la siguiente posada”.

Cada año las diversas comunidades van adaptando los textos con oraciones y reflexiones que les son más propias, y así también ocurre con las imágenes, los villancicos y las acciones que constituyen las posadas. Como ejemplo, transcribimos algunos fragmentos:

«Iniciamos el camino. María y José junto a nosotros, buscan un lugar, un lugar para que nazca el niño: ¿Quién está dispuesto a  dar abrigo al Salvador del Mundo?«

Villancico para pedir posada

Peregrinos:

En el nombre del cielo

les pido posada,

pues ya no puede andar

mi esposa tan amada.

Posaderos:

No los conocemos, sigan adelante,

que aquí no es pensión.

No les podemos abrir,

no vaya a ser usted un ladrón.

Peregrinos:

Venimos rendidos

desde Nazaret,

yo soy carpintero

de nombre José.

Posaderos

No nos importa su nombre,

déjennos dormir,

le repetimos de nuevo:

no les vamos a abrir.

Peregrinos

Posada le pido

amado casero/a,

pues madre va a ser

la Reina del cielo.

Posaderos:

Pues si es una reina

quien lo solicita,

¿Cómo es que de noche

anda tan solita?

Peregrinos:

Mi esposa es María

amado señor

y madre va a ser

de Jesús, Salvador.

Posaderos:

¿Sos vos, querido José?

¿tu esposa es María?

¡Entren, peregrinos

no los conocía!

Peregrinos:

Muchas gracias, amigos

por su caridad infinita

y los llene el cielo

de felicidad bendita.

Todos:

¡Dichosa la casa

que abriga este día

a la Virgen pura,

¡la hermosa María!

¡Entren santos peregrinos,

reciban este rincón,

que, aunque pobre la morada,

se las doy de corazón!