En misión redentora con Mama Antula

“Quisiera andar hasta donde Dios no fuese conocido, para hacerle conocer”  

María Antonia de San José

Desde el año de la beatificación de Mama Antula, la comunidad del Convento de Nuestra Señora de la Merced de Santiago del Estero cuenta con una imagen de María Antonia de Paz y Figueroa para la devoción de los fieles. 

En 2016 se expuso en el templo la obra escultórica realizada por Verónica de Ferrando. Luego de su beatificación estuvo ubicada en el Camarín de la Virgen de la Merced, y cuando se conoció la noticia de la canonización, con alegría se dispuso en frente del templo. 

Actualmente en la ciudad de Santiago del Estero es la imagen más grande de la próxima santa santiagueña, y por eso estará presente como imagen central en el escenario de la fiesta del 11 de febrero. Estará ubicado en la plaza Libertad y se prepara una gran celebración con vigilia de oración, folklore, música y danza. El domingo a las 5 de la mañana se transmitirá en pantalla gigante la misa desde el Vaticano en la que el Papa Francisco declarará a María Antonia de San José como la primera santa argentina. 


Representando a la comunidad del Convento Nuestra Señora de la Merced en Santiago del Estero, Andrea Cejas Recofsky nos cuenta cómo viven este tiempo:

“Nos invade una inmensa alegría… la primera Santa Argentina, mujer de fe, de valentía y decisión, de oración, de coraje en emprender la misión que Dios le pidió. María Antonia de San José, o nuestra querida Mama Antula, para los santiagueños, es ejemplo de amor, de servicio. 

Santiago del Estero se enorgullece de esta hija santiagueña que sembró la semilla de misión, que caminó con pasos silenciosos pero firmes tratando de profundizar la voluntad de Dios. Su vida es todo testimonio… a pesar de la época, de los usos y las costumbres, tenía en claro un futuro distinto, comenzando una experiencia de fe que la llevó a una especial devoción y un nuevo nombre: María Antonia de San José. 

Ella recorría las calles de Santiago del Estero, ayudaba en las actividades de la Compañía de Jesús, en la educación de niños, instruyendo en la fe, cuidando enfermos, distribuyendo la limosna, asistiendo a los sacerdotes jesuitas. Cuando los Jesuitas se retiraron del territorio, Mama Antula firme en sus convicciones continuó la misión, sola y sin ningún apoyo. Caminó a otros territorios, peregrinó como signo de búsqueda de Dios, con la mirada puesta sólo en acercar a los hombres y mujeres al Cristo Resucitado. 

¿Cómo no sentirnos felices con la canonización de esta mujer? Si su vida nos conmueve en lo más profundo de nuestras vidas, si nos moviliza a no quedarnos quietos, a seguir caminando a pesar de todo, a pesar del cansancio, de los miedos, muchas veces de la soledad. Su testimonio nos anima a seguir comprometidos como laicos en anunciar, en mostrar al Dios del amor, de la misericordia, al Dios que es merced para TODOS. 

La Orden de la Merced le otorgó a María Antonia una Carta de hermandad, la sentimos tan cercana, nos sentimos tan hermanos, en sus huellas están nuestros pasos, los pasos de Nolasco que dio la vida por los hermanos, por los cautivos. 

Como comunidad del Convento de Ntra. Señora de la Merced de Santiago del Estero nos preparamos con mucha alegría, oración y fe para este acontecimiento de Gracia. 

Este sábado 9 de Febrero en vísperas a la fiesta, tendremos en nuestro Templo a las 19 hs una Hora Santa. El fin de semana participaremos en las actividades ya propuestas por la diócesis de Santiago del Estero. 

Nuestro compromiso… seguir sus huellas, Mama Antula es una caminante, peregrina de la fe, una verdadera misionera de Jesús. En este camino que es la vida, nos acompañan los santos, hermanos que interceden ante Dios, para que seamos verdaderos discípulos misioneros de Jesús, para trasmitir su vida a todos”.