¡Continuamos la misión en Paraguay!

De acuerdo a lo discernido en el último Capítulo Provincial, los frailes de la Orden de la Merced en Argentina asumieron el compromiso de continuar la experiencia misionera de acompañamiento a las comunidades de Fortaleza y Nueva Esperanza en Paraguay.

Por eso, entre el 21 y el 31 de Marzo, Fr. Ricardo Guzzo y Fr. Matías Bellanich se hicieron presente en los asentamientos paraguayos de Colonia Thompson para seguir dando pasos en Misión Compartida. 

Nos cuenta Fr. Matías: “Estamos retomando las visitas misioneras en Paraguay. Estuvimos en Fortaleza, en la capilla Inmaculado Corazón de María y en Nueva Esperanza, en la capilla Virgen del Carmen, donde siempre nos reciben muy amable y generosamente. 

Vamos haciendo camino a través de distintas actividades: con niños, con los adultos de la comunidad y por supuesto celebrando la Eucaristía y los sacramentos. De un modo especial lo hicimos en este tiempo de Cuaresma y en el marco del Jubileo de la Esperanza.

También vamos sumándonos a ideas y proyectos, por ejemplo un emprendimiento de un taller de costura que si Dios quiere van a empezar en Colonia Thompson.

Hay una laica de las Hnas. Mercedarias de la Caridad que también es muy afín a nosotros, y con unas máquinas que tenían las hermanas, sumando todos un poco nos organizamos para que puedan hacer ese emprendimiento destinado las mujeres de la zona. 

Estos días paramos en la casita que está en la capilla Santísima Cruz. Estamos muy agradecidos con toda la comunidad por todas las atenciones, el cariño y el cuidado con los que nos han recibido.

Durante  el año iremos repitiendo estas visitas misioneras como lo hemos venido haciendo desde el año 2016 con religiosos, laicas y  laicos en interministerialidad redentora”.

Anibal Medina,  coordinador de la capilla Virgen del Carmen en el asentamiento Nueva Esperanza, expresa:

“La visita de los hermanos mercedarios nos ha hecho mucho bien. Nos ayuda su servicio en la evangelización de la comunidad. Para nosotros y para mí personalmente su presencia es muy importante. 

Los misioneros mercedarios saben cómo acompañar a la gente con su carisma, y eso atrae a las personas.  Durante los tres años anteriores que nos han visitado nos han hecho mucho bien, y estamos contentos con la visita de ellos. 

Habíamos pensado que las del año pasado iban a ser las últimas, pero gracias a Dios nos anunciaron que van a seguir tres años más con nosotros y eso nos pone muy contentos. 

Quiero darle gracias a Dios y a Nuestra Señora de la Merced por haberme hecho partícipe de esta misión. Esto es lo que siento. Estoy muy contento y agradecido”.